Tuesday, January 29, 2013

LA REFORMA NO ES CALVINISMO


ALGUNOS REFORMADORES





La Reforma no es Calvinismo, Ni calvinismo es la Reforma. LOS CALVINISTAS SE ADUENAN D LA VERDAD Y D LA REFORMA, La reforma comenzó en Inglaterra más de 200 años antes q Calvino existiera (Pre-reforma) Y ESTOS reformadores MURIERON ASESINADOS (Como John Wyclify) ellos NO ERAN calvinistas, luego esta REFORMA se desarrollo con MARTIN LUTERO (Alemania) y este no era Calvinista. Juan Calvino (Ginebra) surgió DESPUES con una Doctrina de elección y reprobación sacada del monje católico AGUSTIN (400 D.C.). Después de la reforma (Post-reforma) quedaron 5 Corrientes teológicas sistemáticas con respecto a la Relación de Dios con el Hombre: Sistemas teóricos representativos descritos en el libro “Hermeneutica; Principios y procesos de Interpretacion Biblica.  Pg. 121-146. Por Henry A.Virkler y Karelynne G.
#1 Teología Luterana, 
#2 Teología Liberal
 #3 Teología Calvinista, 
#4  Teología Arminiana, 
#5 Teología Progresista. 

"Reforma" no significa ni calvinismo, ni erasmismo ni luteranismo. Hans Kunk explica los 3 tipos de Iglesias que emergieron durante esa época: Protestantes, reformados (calvinistas) e Iglesias libres (Bautistas Generales). Cómo es eso que porque Erasmo tuvo disensiones con Lutero, queda descalificado? Es que Lutero es Dios? No es que Erasmo "no quiso tomar parte de la Reforma", mi estimado: Erasmo, Lutero, Calvino, Enzinas, Ponce de León, Reina, Valera, Edigio, Julianillo Hernández y los miles de mártires que murieron por el fuego enemigo de Roma, SON PARTES FUNDAMENTALES de LA REFORMA.
Sin ellos no hubiese sido posible lo que llamó REFORMA.


LA REFORMA NO ES CALVINISMO, NI CALVINISMO ES LA REFORMA.
Lo INJUSTO del "dios" Calvinista es que "ese dios" en la eternidad ORDENA O DECRETA TODAS LAS COSAS "como el quiere" POR EJEMPLO "el dios justo calvinista" DECRETO Que Adán caiga en pecado "sin ser ese dios culpable" pero EL DECRETO así que en Adán todos se vuelvan pecadores para luego APLICAR SU JUSTICIA, "La paga del pecado es muerte, PARA CONDENAR A TODOS" entonces ese "dios Justo" DECIDE en su "soberanía" SALVAR de entre todos los que merecen muerte "Los que el eligió". ESE "dios calvinista" PRIMERO ORDENA que exista el mal para el "Mostrar su Justicia" y CONDENAR A MUCHOS, NO LE PARECE INJUSTO A UD?

Claro los calvinistas justifican esto CITANDO MAL INTERPRETADAMENTE Su soberanía Rom. 9 basada en su capricho y no en la verdadera Justicia de Dios la cual es alcanzada POR LA FE Rom.9:30-33 Y no por el capricho "divino".
MI PREGUNTA AQUI ES Como Dios pudo ordenar que nosotros hiciéramos mal voluntariamente (Especialmente los "reprobados o no elegidos") y aun así NO LO PODEMOS CULPAR a El de ese MAL?... ESA ES LA ASTUCIA DEL DIABLO HACERLE CREER A TONTOS CRISTIANOS QUE EL DIABLO NO ES EL CAUSANTE DEL MAL SINO DIOS PORQUE EL ASI LO DETERMINO O DECRETO.... Que Falso es Satanás.... MacArthur, John Piper, Paul Washer y todos los calvinistas predican que el MAL FUE DECRETADO, ORDENADO Y PLANEADO POR DIOS... (Yo diría mas bien Permitido...Hasta aquí yo llego, pero culpar a Dios del MAL ES BLASFEMIA, pues NI a un Cristo que es el UNICO que conoce al Padre SE ATREVIO A acusar a Dios del Causante del Mal, por lo Contrario Cristo ACUSO AL DIABLO COMO EL PADRE DEL MAL.... Juan 8:44: Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y PADRE DE MENTIRA.

FALSOS PREDICADORES "PERROS"



GUARDAOS DE LOS PERROS

Por: Rev. Luis M. Ortiz

“Por lo demás, hermanos, gozaos en el Señor. A mí no me es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es seguro. Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo. Porque nosotros somos la circuncisión, los que en espíritu servimos a Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús, no teniendo confianza en la carne. Aunque yo tengo también de qué confiar en la carne. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en la carne, yo más: circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley, fariseo; en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que es en la ley, irreprensible. Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo”, Filipenses 3:1-8.

Los conceptos bíblicos que sustentaba el gran Apóstol Pablo con respecto a la Obra de Dios y al ministerio cristiano, son realmente admirables y contundentes, este iluminado hombre de Dios no confundía las cosas, al mismo tiempo que se hacía débil, para ganar a los débiles, era también muy cuidadoso y escrupuloso con los que traían deshonra a la bendita causa de Cristo, y exhortaba a los hermanos a apartarse de los tales. Al mismo tiempo que era tierno y blando, como la que cría, por el bien de los cristianos fieles, también era inflexible y riguroso con los falsos creyentes a quienes llama corruptos, hinchados, locos, contenciosos.

Al mismo tiempo que quería presentar o entregar la Iglesia a Cristo como una virgen pura, también estuvo dispuesto a entregar a Satanás a aquel impío y lascivo que estaba dentro de la Iglesia de Corinto. Al mismo tiempo que se refería a sus colaboradores y ministros fieles llamándoles hijos, y tenía estrecha comunión con ellos, así también exhortaba firmemente en contra de los falsos predicadores, diciendo: “Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo”, Filipenses 3:2.

Según el diccionario una perrada es una acción villana, una traición; una perrera es una rabieta; una perrería es un conjunto de mala gente; una muerte de perros es morir sin arrepentirse. ¿Por qué San Pablo usa el término de perros para los falsos hermanos y falsos predicadores? Este calificativo era usado desde mucho antes de San Pablo, para personas viles e indignas, y fue aplicado por el Espíritu Santo de la misma manera en el A.T. En Isaías 56:10-11 son llamados “perros mudos, no pueden ladrar; soñolientos, echados, aman el dormir. Y esos perros comilones son insaciables; y los pastores mismos no saben entender; todos ellos siguen sus propios caminos, cada uno busca su propio provecho, cada uno por su lado”. En el Salmo 22:16 que es un salmo mesiánico, el Espíritu Santo usa al salmista David, para llamar perros a los que crucificaron a Cristo, y dicen: “Porque perros me han rodeado; me han cercado cuadrilla de malignos; horadaron mis manos y mis pies”.

Y anteayer y ayer los hubo; hoy de que los hay, los hay; y mañana también habrá perros, o sea malos obreros. Hay quienes dicen ser grandes profetas y profetizas, pero los tales espantan y desparraman las ovejas, pues se ha visto en ellos torpeza, cometen adulterio, andan en mentiras (Jeremías 23:2,14). "Os alimentan con vanas esperanzas; hablan visión de su propio corazón, no de la boca de Jehová”, Jeremías 23:16; y así con sus falsos mensajes se llevan miembros de otras congregaciones, se quedan con el dinero de los incautos, rompen matrimonios legítimos y los recasan con otras personas, y con relación a los tales es que San Pablo advierte: “Guardaos de los perros”.

Hay los que se creen ser grandes maestros, pero "sin entender ni lo que hablan ni lo que afirman" (1 Timoteo 1:7). Que con “hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia" (1 Timoteo 4:2). "Maestros conforme a sus propias concupiscencias" (2 Timoteo 4:3). “Trastornan casas enteras, enseñando por ganancia deshonesta lo que no conviene" (Tito 1:11). Estos falsos maestros siempre tienen una carnada de una y que otra verdad bíblica, y luego vienen con una variedad de medias verdades, de aparentes verdades, abundancia de interpretaciones propias y convencionales, y un semillero de falacias y de engaños con ropaje de amor, de compasión, de comprensión y humanismo; pero los tales traen sobre sí mismos perdición acelerada (2 Pedro 2:11). Y no olvidemos que con relación a estos falsos maestros San Pablo amonesta: “Guardaos de los perros”.

Hay quienes se consideran a sí mismos ser grandes pastores, pero no alimentan el rebaño del Señor, con la verdadera Palabra de Dios y con la Sana Doctrina, no apacientan la Iglesia del Señor; la cual Él ganó con su propia sangre (Hechos 20:28). Lo que le dan a los rebaños son interpretaciones humanas, dogmas, tradiciones, ceremonias, ritualismos, vanas filosofías, intelectualismo, humanismo, himnos con ritmos mundanos y sensuales, música de tierra adentro y de cielo afuera; que se apacientan a sí mismos, mientras las ovejas se desparraman por falta de pastor (Ezequiel 34:2, 9). Trasquilan la gorda y no corroboran a las flacas (Ezequiel 34:3 y 21). Son perros mudos, soñolientos, aman el dormir, no conocen altura, todos ellos miran a sus caminos, cada uno a su provecho (Isaías 56:10-11). Lobos rapaces que se enseñorean del rebaño del Señor (Hechos 20:29). Estos también caen bajo la severa sentencia de San Pablo: “Guardaos de los perros”.

Hay quienes se autoproclaman como grandes evangelistas, y aun muchos recién convertidos que, o porque fueron libertados de la drogadicción, o porque actuaron en televisión, o porque fueron compositores y cantantes profesionales en el mundo creen que eso les da derecho y credencial de grandes evangelistas intercoloniales, interestatales, interdenominacionales, internacionales, intercontinentales, interplanetario con los viajes espaciales, y hasta interesados; pero casi siempre su obra es quemada, pues no permanece (1 Corintios 3:14, 15); y tienen la piedad por ganancia (1 Timoteo 6:5-9); los tales no sirven al Señor Jesucristo, sino a sus vientres, y con suaves palabras engañan a los corazones de los ingenuos (Romanos 16:18); sienten lo terreno cuyo dios es el vientre, y cuyo fin será perdición (Filipenses 3:19). Pues son obreros fraudulentos (2 Corintios 11:4); que pervierten el Evangelio de Cristo (Gálatas 1:7); predican por envidia y contienda (Filipenses 1:15); y son enemigos de la cruz de Jesucristo (Filipenses 3:18); con razón San Pablo levanta la voz de alerta: “Guardaos de los perros”.



Estos malos obreros que son un escarnio, una ofensa para el Evangelio. Ellos pueden hacer ahora como les parece, enseñar como les plazca, actuar como les dé su regalada gana, vivir como quieran, pero por ahora el Señor nos orienta acerca de ellos, y nos dice: “No deis lo santo a los perros” (Mateo 7:6). El apóstol Pedro nos explica la situación de los tales, a los que abandonan la vida de consagración y de santidad, y se enredan otra vez en las cosas y contaminaciones del mundo; dice que les “ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito” (2 Pedro 2:22). Y el apóstol Juan en las visiones del Apocalipsis al mostrarle el Señor las glorias de la ciudad santa también le muestra el destino final y eterno de los tales y les dice: “Mas los perros estarán fuera” (Apocalipsis 22:15).

Es cierto que anteayer y ayer hubo malos obreros, y hoy también los hay y mañana los habrá, pero también es muy cierto que anteayer y ayer hubo, y hoy también los hay buenos obreros del Señor: fieles, dignos, santos, que honran al Señor Jesucristo, honran la Palabra de Dios, honran la Doctrina cristiana, honran el Evangelio, honran la Iglesia, honran su cónyuge, honran su hogar, honran su familia, honran al gobierno y las leyes que no confligen con su amor, su devoción y su adoración a Dios. “Sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios” (1 Pedro 2:9); “de los cuales el mundo no era digno” (Hebreos11:38); y por cuanto este mundo de tanto conflicto y turbación y confusión no es lugar adecuado para que este linaje escogido, este pueblo santo siga viviendo en este mundo, el Señor Jesucristo le promete: “No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis” (Juan 14:1-3).

Y como son muchos los que creen que viviendo como a ellos se les antoje en el reino de los cielos el Señor aclara “que en aquella noche estarán dos en una cama; el uno será tomado, y el otro será dejado. Dos mujeres estarán moliendo juntas; la una será tomada, y la otra dejada. Dos estarán en el campo; el uno será tomado, y el otro dejado” (Lucas 17:34-36); pues “no todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos” (Mateo 7:21). Puesto que muchos más le reclamarán al Señor diciendo: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de iniquidad” (Mateo 7:22-23).

Y este gran evento será repentino “porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1 Tesalonicenses 4.16-17). Y por cuanto estamos viviendo en los días del Señor, el cual va a levantar a los suyos, Él nos amonesta diciendo: “Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir” (Mateo 25:13). Aquí en este mundo hay mucha maldad, pecado, corrupción, injusticia, mentira, ira y engaño pero el Señor va a llevar a sus redimidos a la gran ciudad celestial y “no entrará en ella ninguna cosa inmunda, o que hace abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la vida del Cordero” (Apocalipsis 21:27).

Amigo, si desea ser hecho ciudadano de esa gran ciudad eterna por medio del nuevo nacimiento, arrepiéntete de tus pecados y recibe a Cristo como tu gran Salvador, levante su corazón y su mano en el nombre del Señor. Descarriado si no arreglas tu vida con Dios, si no vuelves al Señor serás dejado fuera. Aprovecha estos instantes y reconcíliate con Dios. Hermano, si en tu vida hay algo que te impide subir deja todo lo que tengas que dejar no pierdas esta cita eterna con el Señor.

Monday, January 28, 2013

SECUENCIA DIVINA EN EL ETERNO PROPÓSITO



SECUENCIA DIVINA EN EL ETERNO PROPÓSITO
Por el Rev. Luis M. Ortiz



Veamos, pues, la secuencia divina en el Eterno Propósito de Dios en estos versículos bíblicos ya mencionados.

Primero: Lo básico, fundamental y eterno es el Propósito de Dios. De no haber habido un Propósito de parte de Dios, nada hubiese sido creado.

Segundo: Dios “escudriña los corazones... Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito (de Dios) son llamados”, Romanos 8:27.

Tercero: A éstos que son llamados, “a los que antes conoció...” (Romanos 8:29); esto es, los conoció de antemano, por anticipado, y supo que responderían a Su llamado, pues “Dios nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito (o el intento) suyo (de Dios)...” (2 Timoteo 1:9). Habiendo sido “elegidos según la presciencia de Dios Padre” (1 Pedro 1:2).

Cuarto: “A los que antes conoció (a los que conoció de antemano), también los predestinó”, Romanos 8:29. En los cinco versículos bíblicos en el Nuevo Testamento que se usa la palabra “predestinar” en ninguna de ellas se usa aplicada a la salvación del alma, sino que la palabra “predestinar” se usa aplicada a bendiciones y posteriores a la salvación del alma.

Al hombre natural Dios no le predestina ni para salvación, ni para perdición. Al hombre natural Dios le ha dado una voluntad propia, un libre albedrío, para que tome sus propias decisiones.

Quien decide creer en Cristo, se arrepiente de sus pecados, y acepta a Cristo como Salvador, es salvo, es hecho hijo de Dios, y como tal está predestinado para mayores glorias, para “cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman”, 1 Corintios 2:9.

Quien decide rechazar a Cristo, vive en pecado, muere en pecado, está predestinado para el infierno y para el lago de fuego, pues el que no fue hallado escrito en el libro de la vida (en el Cielo), fue lanzado “al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles”, Mateo 24:15; 25:41.

EL PROPÓSITO DE DIOS PREDESTINADO

Aunque Dios no predestina al individuo, ni para salvación ni para perdición, empero, para Su eterno propósito, él empeñó su Palabra, y lo predestinó para que con el transcurrir del tiempo fuera iniciado, desarrollado y consumado.

Lo primero que Dios estructuró, ordenó y predestinó fue Su eterno propósito. Este es un propósito creador para crear la raza humana; un propósito redentor para redimir al hombre pecador; un propósito regenerador para engendrar hijos; un propósito santificador para hacerlos santos; y un propósito glorificador para glorificarlos semejantes a Cristo, por la eternidad.

En Lucas 22:22, se nos dice que Jesús fue entregado, “según lo que está determinado” en el propósito de Dios.

En Hechos 2:23, se afirma que Cristo fue “entregado por el determinado consejo (o propósito) y anticipado conocimiento de Dios”.

En Romanos 8:28, se declara que Dios llama “conforme a su propósito”.

En 2 Timoteo 1:9, se establece que Dios “nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo”.

En 1 Corintios 2:7, se nos habla de la “sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta”, “que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia, dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo”, esto es, Su propósito. Efesios 1:8-9.

Quiere decir, que Dios primeramente estructuró, ordenó y predestinó Su eterno propósito para su ejecución en la tierra, y su consumación eterna en el Cielo. Su propósito, sí fue pre-ordenado y predestinado.

Luego, dentro del propósito eterno de Dios, el Logos, el Verbo Eterno, nuestro Señor Jesucristo se incluyó a sí mismo, y fue predestinado a Sus padecimientos y a Su obra redentora. Veamos:

En Lucas 22:21-22, dice: “Mas he aquí, la mano del que me entrega está conmigo en la mesa. A la verdad el Hijo del hombre va, según lo que está determinado”, desde luego, en el propósito de Dios.

En Hechos 2:23, el apóstol Pedro en el día de Pentecostés dijo a la multitud: “A éste (a Jesús), entregado por el determinado consejo (el propósito de Dios) y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole”.

En Hechos 4:24-28, Pedro y los hermanos reunidos, oraron diciendo: “Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay; que... Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu consejo (o propósito) habían antes determinado que sucediera”.

En Efesios 3:10-11, el apóstol Pablo, escribe: “Para que la multiforme sabiduría de Dios (o sea Cristo) sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales, conforme al propósito eterno que (Dios) hizo en Cristo Jesús nuestro Señor”.

En 1 Pedro 1:18-20, leemos: “Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación, ya destinado desde antes de la fundación del mundo”. Nuestro Señor Jesucristo con Su obra redentora se incluyó a sí mismo dentro del eterno propósito de Dios. Isaías 6:8, Salmo 40:7-8.

En cuanto al individuo, todos aquellos que rechazan a Cristo, su sacrificio y el derramamiento de Su preciosa sangre en la cruz del calvario, ellos mismos han tomado su propia decisión, y ellos mismos se condenan a sí mismos, “porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por Él. El que en Él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios”, Juan 3:17-18.

Todos estos versículos nos demuestran que la Salvación es un tesoro que Dios ha puesto en vasos de barro (nuestro cuerpo), pero que Dios también puede retirar el tesoro del vaso que se torna en vaso de deshonra y de pecado.



 NI CALVINISTA NI ARMINISTA, CRISTIANO NACIDO DE NUEVO LLENO DEL ESPIRITU SANTO CON LA EVIDENCIA DE HABLAR EN LENGUAS.



NO SOY CALNVINISTA NI ARMINISTA CREO LO QUE La Biblia dice. ESTA DICE que la FE viene por el OIR la Palabra Rom.10:17, Sin la Palabra de Dios la Fe no VIENE al hombre, por eso la Fe es un trabajo en conjunto Dios-Hombre, Dios (TOMA LA INICIATIVA Y NO EL HOMBRE) para abrirle el Corazon para HABLARLE al hombre Hech.16:14 El Espiritu Convence AL MUNDO (No solo los "elegidos") de pecado y el hombre frente a esta obra TIENE LA DESICION DE CREER O NO CREER (Sin esta obra de DIos el hombre no puede decidir por Dios Josue 24:15) Pero frente a la predicacion de la Palabra el oyente DECIDE CREER O NO CREER, Por eso la Biblia habla de LA FE DE LA PERSONA, Habacuc 2:4: He aquí que aquel cuya alma no es recta, se enorgullece; mas el justo POR SU FE vivirá.... NO SOY ARMINISTA el cual cree que el Hombre puede CREER SIN LA INTERVENCION DE DIOS (Sin el evangelio nadie puede creer para ser salvo) TAMPOCO SOY CALVINISTA el cual INABILITA TANTO al hombre que frente a la obra de Dios (El evangelio hablado por Dios y la conviccion del Espiritu) EL HOMBRE NO PUEDE CREER sino que nesecita ser resucitado primero,Y ESTO es falso Porque el Apostol Pablo dice "él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados" Efe.2:1 "Porque por gracia sois salvos POR MEDIO DE LA FE; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;"Efesios 2:8 PERO ESA VIDA que es el regalo de Dios VINO FUE por MEDIO de la Fe (Calvinistas dicen que el regalo es LA FE) El Regalo es Cristo Rom.6:23..."mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro" La fe vino POR LA PREDICACION DE LA PALABRA Y CONVICCION DEL Espiritu, el CONTEXTO de Efe.2:1 esta en el cap 1:13, " En él también vosotros, habiendo OÍDO LA PALABRA DE VERDAD (Fe viene por el OIR)el evangelio de vuestra salvación, y HABIENDO CREÍDO EN ÉL, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa," Efe.1:13 Los calvinistas SON POBRES EN HERMENEUTICA Y EXEGESIS al interpretar todos los textos de su doctrina SIN EL CONTEXTO. Jesus le dijo a Nicodemo "Os es necesario nacer de nuevo." Como puede Nacer? Jesus le habia dicho antes como nacer de nuevo "...el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios." NACER Del Agua quiere decir LA PALABRA DE DIOS "Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el LAVAMIENTO DEL AGUA POR LA PALABRA," Efe.5:25-26. El, de su voluntad, NOS HIZO NACER POR LA PALABRA DE VERDAD, para que seamos primicias de sus criaturas. Santiago 1:18... Y Por su puesto EL ESPIRITU es el que Convence de pecado Juan 16:8-9, NUEVO NACIMIENTO ES EL RESULTADO DE HABER CREIDO A LA PALABRA POR LA CONVICCION DEL ESPIRITU SANTO. FRENTE A ESTA OBRA (Palabra y Espiritu) El hombre puede CREER en Cristo SI QUIERE (Juan 5:40, Mat.23:37) o puede cerrarle el Corazon al Senor, "Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones" He.3:7-8, DIOS NO OBLIGA A NADIE A DECIDIR FRENTE A SUPALABRA, "He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno OYE MI VOZ Y ABRE LA PUERTA (DECIDE POR EL despues de haber oido SU VOZ), entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo." Apo.3:20, REPITO DIOS NO OBLIGA A NADIE tanto que Jesus Dijo que si el Cristiano NO PERDONA a su hermano o a alguien, TAMPOCO DIOS LO PERDONARA, "Marcos 11:26: Porque si vosotros no perdonáis, tampoco VUESTRO PADRE (Hijo de Dios puede perderse) que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas. Mar.11:26. POR ESO REPITO NO SOY ARMINISTA Quien presenta a un Hombre capaz de creer SIN LA CONVICCION DEL ESPIRITU, NI LA OBRA DE DIOS QUIEN ABRE EL CORAZON PARA HABLARLE AL HOMBRE. Ni soy CALVINISTA que mata y ANULA tanto al hombre que NESECITA SER RESUCITADO PARA CREER.... FALSO la fe viener por el oir EL OIR LA PALBRA.... ENCAJONAR A DIOS A UN SISTEMA TEOLOGICO (Calvinista o Arminista) ES PECADO, porque Dios habla es a travez de Su Palabra INTERPRETADA POR EL ESPIRITU y no por un sistema Teologico Calvinista (TULIP) que Tiene raices gnosticas los cuales INTERPRETABAN LA BIBLIA a travez de la Filosofia NI MUCHO MENOS POR UNO ARMINISTA que sus raices son RELIGIOSAS que ensenan salvacion por obras. Colosenses 2:8: Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, Y NO SEGÚN CRISTO.Colosenses 2:8

LA SALVACION NO SE PIERDE, SE PIERDE QUIEN LA DESCUIDA.



LA SALVACION NO SE PIERDE YA QUE JESUS ES LA SALVACION Y EL ES  ETERNO, EL QUE SE PIERDE ES EL QUE DESCUIDA LA SALVACION.


usted cree que un cristiano  ya salvo es siempre salvo???

Rta.

 Cuando muere en Cristo YA ES SALVO SIEMPRE SALVO, pero mientras estemos vivos tendremos que PERMANECER EN CRISTO PORQUE SI NO PERMANECEMOS EN EL NOS PERDEREMOS... "Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. EL QUE EN MÍ NO PERMANECE, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden." Juan 15:5-6......




De aqui en adelante por Rev. Luis M. Ortiz.
 El término “predestinación” fue mal interpretado y mal aplicado desde los tiempos de San Agustín. “Predestinado”, se le decía, y se le dice a aquel individuo que supuesta e incondicionalmente se salvará según un supuesto decreto de Dios. Y según la teoría de San Agustín, a aquellos que Dios no predestina para ser salvos, los deja, los abandona en su merecida condenación y perdición. ¡Nada más lejos del Amor, de la Justicia, de la Sabiduría de Dios, de la contundente evidencia bíblica y de la experiencia personal!

Está claramente en la Biblia que cuando es usada la palabra “predestinación”, o “predestinados”, se está refiriendo, no a inconversos para ser predestinados a la salvación, sino que se está refiriendo, y se les está escribiendo a los cristianos en conjunto, a los ya salvados, a los ya redimidos, a los que voluntariamente aceptaron el Eterno Propósito de Dios de salvarnos en Cristo, “a quien amáis sin haberle visto, en quien creyendo, aunque ahora no lo veáis, os alegráis con gozo inefable”, 1 Pedro 1:8. “Para vosotros, pues, los que creéis, él es precioso; pero para los que no creen, la piedra que los edificadores desecharon (voluntariamente), ha venido a ser la cabeza del ángulo; y: piedra de tropiezo, y roca que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron también destinados”, 1 Pedro 2:7-8.

Así como aquel que cree en Cristo, desde el momento que voluntariamente recibe a Cristo es hecho hijo de Dios, heredero de Dios y coheredero con Cristo (Romanos 8:17), y por causa y virtud de su vida transformada por el nuevo nacimiento en Cristo, desde ese momento queda destinado o predestinado para recibir mayores bendiciones y recompensas en el Cielo (1 Corintios 2:9), desde luego, si permanece fiel; de la misma manera, el que no cree en Cristo, el que voluntariamente rechaza a Cristo, por causa de su propia desobediencia, hace de Cristo una piedra de tropiezo, y por lo mismo, se está destinando o predestinando a sí mismo para caer en el lugar destinado o predestinado para los desobedientes, incrédulos, rebeldes y pecadores: el lago de fuego que arde con azufre (Apocalipsis 20:15; 21:8).

A la persona que le hacen creer que Dios le predestinó para ser salvo, la tal persona descarga en Dios toda responsabilidad por la salvación; no se ocupa de la salvación como nos advierte Dios en su Palabra; sigue amando al mundo y las cosas del mundo. Y para que la persona esté tranquila y confiada en su supuesta predestinación, se le suministra un sub-producto de la llamada predestinación, diciéndole que “una vez que uno es salvo, es siempre salvo”. ¡Y resulta que el remedio es peor que la enfermedad!

En las Sagradas Escrituras la salvación del alma es comparada con el resplandor de la gloria de Dios en nuestros corazones; y también se nos dice que “tenemos este tesoro en vasos de barro”, 2 Corintios 4:6, 7. De un valor tan incalculable y eterno es la salvación del alma, que el Señor, dijo: “Porque ¿qué aprovechara al hombre, si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?”, Mateo 16:26.

Por esta razón el apóstol Pablo, escribe: “Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor”, Filipenses 2:12.

Y en Hebreos 2:3, leemos: “¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron”. La respuesta es: ¡No hay escape!

Todos estos versículos, y los siguientes, nos demuestran que la salvación es un tesoro que Dios ha puesto en vasos de barro (nuestro cuerpo), pero que Dios también puede retirar el tesoro del vaso que se torna en vaso de deshonra y de pecado.

“Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo... Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio” (Hebreos 3:12,14). “Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mateo 24:13). “Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios (es decir, perdió a Dios, perdió la salvación); el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo” (2 Juan verso 9).

“Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud” (Gálatas 5:1). “Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el señor, amados” (Filipenses 4:1). “Para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios;... en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados... si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído... para que estéis firmes, perfectos y completos en todo lo que Dios quiere” (Colosenses 1:10, 14, 23; 4:12).

“Porque es imposible que los que una vez fueron iluminados y gustaron del don celestial, y fueron hechos participantes del Espíritu Santo, y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero, y recayeron, sean otra vez renovados para arrepentimiento, crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios y exponiéndole a vituperio” (Hebreos 6:4-6).

“Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió... no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca. Porque si pecáremos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados, sino una horrenda expectación de juicio, y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios... ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?... ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!” (Hebreos 10:23, 25-27, 29, 31).

“Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor” (Hebreos 12:28-29).

Amados, cuando Moisés pidió a Dios que perdonara el pecado del pueblo de Israel por haber adorado el becerro de oro, Moisés oró y dijo: “Te ruego, pues este pueblo ha cometido un gran pecado, porque se hicieron dioses de oro, que perdones ahora su pecado, y si no, ráeme (bórrame) ahora de tu libro que has escrito. Y Jehová respondió a Moisés: Al que pecare contra mí, a éste raeré yo de mi libro”, Éxodo 32:31-33.

En el mensaje a la iglesia de Sardis, el Señor le dice: “El que venciere será vestido de vestiduras blancas; y no borraré su nombre del libro de la vida”, Apocalipsis 3:5.

Y concluyendo el texto sagrado de la Biblia el Señor Jesucristo, dice: “Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro”, Apocalipsis 22:19.

Amado lector, Dios tiene un libro, el libro de la vida. En este libro son escritos los nombres de los fieles a Dios, que aman y adoran a Dios; y a la vez no están escritos en este libro los que no adoran a Dios, sino a sus dioses falsos. Apocalipsis 13:8; 17:8.

Amado lector, Dios escribe los nombres de los salvos, de los fieles, de los santos en el libro de la vida; y Dios también borra del libro de la vida los nombres de los que se descarrían, de los infieles, de los que se vuelven al pecado.

Amado lector, la teoría de la predestinación no ha pasado de ser eso mismo, una mera teoría. Y el sub-producto de “una vez salvo, siempre salvo”, no ha pasado de ser una falacia, un cruel engaño.

Amado lector, Dios da y Él quita. Dios da al fiel y al humilde, y quita al infiel y al soberbio.

Amado lector, la salvación del alma no es incondicional. Conlleva condiciones establecidas por Dios el Dador. Cada bendición que Dios da en Su Amor y en Su Gracia, está condicionada con una responsabilidad que Dios demanda en Su Santidad y en Su Justicia.

“Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”, 1 Corintios 15:58.